Semana 6: del 11 al 15 de abril
La experiencia esta semana me agradó mucho porque tuve la oportunidad de
aprender cosas nuevas tanto en el aspecto teórico como en el práctico. Para este
nivel de mi periodo de asistencia me siento con mucha confianza durante las
sesiones de los pacientes e incluso me es más fácil interactuar con ellos. Mi cortesía
también mejoró bastante a comparación de la primera semana de asistencia.
Hay muchas cosas que aprendí esta semana, pues debido a la inasistencia
de algunos pacientes, nuestra pasante propuso realizar un pequeño taller. Hablamos
del TENS y de las corrientes galvánicas. De estas últimas corrientes ya no recordaba muchos aspectos y el repaso
que tuvimos sobre el tema me ayudó mucho para refrescar algunos conceptos, pero
también para aprender cosas nuevas sobre las corrientes galvánicas.
Lo nuevo que observé fueron los instrumentos/aparatos que se encuentran
en el salón de isocinética. La razón principal fue que uno de los pacientes tendrá
sus sesiones en dicha área a partir de la próxima semana. Tuvimos la oportunidad
de observar los parámetros que manejan y
también de analizamos cuáles son los efectos u objetivos que busca cada aparato.
Por ejemplo, vimos que el desestabilizador ofrece diferentes modalidades para
trabajar y un punto importante es que cuenta con diferentes niveles de
estabilidad que pueden ser regulados por el fisioterapeuta. Mientras más
inestable se encuentre la superficie podemos trabajar la propiocepción y el
equilibrio, pero si vamos aumentando el nivel de estabilización (lo cual hace
que la superficie sea más difícil de mover = resistencia) podemos trabajar cuestiones
como el fortalecimiento muscular o el estiramiento de miembro inferior.
Otras situaciones nuevas que observe fueron las valoraciones de dos
niños de 6 y 13 años. Nunca había entrado a una valoración donde el paciente se
tratara de un niño y después de haberlas observado puedo decir que mientras más
pequeño sea el paciente más complejo se vuelve el proceso.
En cuanto a mis contribuciones puedo mencionar que realice algunas
colaboraciones para realizar la historia
clínica de los pacientes pediátricos que ya he mencionado. Aunque mis
aportaciones fueron sencillas, creo que si
fueron de utilidad para complementar el documento en los campos en los que mi
pasante no recordaba toda la información recaudada en la examinación. Además, con
estas contribuciones me di cuenta que mi “ojo clínico” ha mejorado bastante en
el momento de realizar la valoración postural.
Mi propuesta principal para mejorar mi desempeño es leer e investigar mas sobre los agentes físicos aplicados
frecuentemente en los pacientes para poder analizar los efectos que generan.
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